ALBERGUE DIOCESANO "BELÉN", FUI FORASTERO Y ME ACOGISTE A.C.
COMUNICADO DOMINICAL MONSEÑOR - LA MIGRACION EN NUESTRA DIOCESIS

COMUNICADO DOMINICAL SOBRE LA MIGRACION EN NUESTRA DIOCESIS POR MONSEÑOR JAIME CALDERON CALDERON OBISPO DE TAPACHULA.

Encuentro Binacional de Obispos de la Frontera Guatemala–México: 17 al 20 de junio en Malacatán, San Marcos, Guatemala. Se realizó el Encuentro con el objetivo de contextualizar e identificar las prioridades y los desafíos comunes en materia de migración, refugio y trata de personas en la frontera México-Guatemala y de este modo fortalecer los servicios pastorales de atención y protección a personas migrantes y víctimas de violencia. Se ha podido, a través de la reflexión e intercambio, actualizar el contexto migratorio, en las Diócesis fronterizas de Guatemala y México y en otros corredores migratorios. De modo que se ha podido constatar una “cruda realidad afrontada por la migración forzada, los migrantes en tránsito, los solicitantes de la condición de refugio, y la trata de personas… casi nula respuesta humanitaria por parte de los Estados de la región para la atención de las personas en movimientos mixtos, que enfrentan condiciones adversas durante su tránsito por los territorios, especialmente en un contexto determinado y dominado por la violencia multidimensional que pone en riesgo su vida, quedando expuestas al crimen organizado, trata de personas, abusos de autoridad y en consecuencia vulneraciones a sus Derechos Humanos (…) los Estados no garantizan el derecho a la vida y a la protección de las personas en situación de vulnerabilidad, especialmente mujeres, niñas, niños, adolescentes no acompañados o separados de su familia y personas con discapacidad (…) La falta de protección internacional a las personas que han dejado sus países de origen por la violencia, las amenazas de muerte, la extorsión, el reclutamiento de las pandillas y las organizaciones delictivas; la desigualdad, la falta de oportunidades, la desprotección social, el cambio climático, entre otras, han empujado a las personas a buscar nuevas alternativas de vida (…) El crimen organizado, en la actualidad, interviene y controla las rutas migratorias y pone en mayor riesgo la vida e integridad física de las personas migrantes (…) el exacerbado incremento de personas migrantes: niños, niñas, mujeres, familias completas, adultos mayores, y percibimos con preocupación que intencionalmente los gobiernos invisibilizan y no toman en cuenta el deber de protección de las personas migrantes al dejarlas en situación de calle.” Ante estos escenarios compartidos de los contextos fronterizos, se identificaron los retos y se priorizaron las acciones, para implementarlas en corto y mediano plazo. Agradecemos de corazón al P. César Augusto, responsable Diocesano de la Comisión de Movilidad Humana, que nos ha representado en dicho Encuentro. Asumimos los compromisos.

+ Jaime Calderón Calderón
VIII Obispo de Tapachula.